Esa mañana cuando Felipe se despertó en su departamento de Miraflores tuvo la intuición que en la noche vendría un sueño especial. Él siempre esperaba la noche para poder soñar. Desde joven había soñado mucho, pero ahora a sus 82 años soñaba más que nunca. No estaba seguro qué día era, así que fue a su escritorio a buscar su agenda. Su agenda era marrón y tenía en la portada sus iniciales grabadas en dorado: FT. Abrió la agenda y se acercó a ella para olerla. El olor a papel seguía siendo de sus olores favoritos desde que leyó su primer libro cuando era niño. Vio la semana en la agenda y confirmó su sospecha: hoy era jueves. Los jueves se sueña en grande dijo en voz alta. Cerró la agenda con energía y salió de su escritorio. Decidió que esta noche tomaría lonche más temprano. A las seis en punto de la tarde fue a la cocina a sacar todo lo que necesitaba. La cocina estaba impecable y sobresalían unas flores naranjas y blancas que estaban en una repisa de madera. Había un comedor de...
Retomo este blog después de 10 años con el mismo nombre, pero con más crónicas, viajes, preguntas y cafés.